Abordar el emprendimiento trasciende la frase de “ser tu propio jefe”. Requiere de una actitud positiva, de un espíritu arriesgado y, claro, de una metodología de trabajo constante, pues, de nada sirve elaborar un sinfín de estrategias si no existe una correcta planificación y organización además de la ejecución de un plan de acción que hará de tu negocio algo exitoso.
Si la idea de tu empresa ya está establecida te preguntarás ¿qué debo hacer ahora y por dónde debo comenzar? La respuesta es elaborar un Plan de Negocio que determine los objetivos a alcanzar en un período específico, para así atraer la atención de los posibles inversores si no cuentas con el capital necesario para su puesta en marcha, y, por consiguiente, captar clientes que se identifiquen con tu compañía con el paso del tiempo.
Un modelo o plan de negocios exitosos debe contemplar una Portada que incluya nombre y logo de la empresa, correo electrónico, teléfonos, página web, redes sociales, dirección y una breve biografía del fundador y de otros colaboradores.
Un Resumen Ejecutivo de los Objetivos específicos y generales en el que se destaque primeramente las ventajas del producto o servicio, la filosofía de la empresa (misión, visión y valores), la finalidad de haber creado la empresa, la oportunidad en el mercado, las fuentes de ingresos, el plan de administración, financiamiento y rentabilidad.
Un Resumen de las Fortalezas y Debilidades de tu Competencia, pues, es de suponer que existen otras organizaciones similares a las tuyas, pero en este apartado deberás incluir el por qué tu empresa es única; cuál es el plus o el valor agregado que la diferencia del resto. También es conveniente detallar los cargos y funciones de tu equipo de gestión, de esta forma tu posible inversor podrá percibir el nivel de compromiso y responsabilidad que están dispuestos a asumir.
Al emprender debemos tener en cuenta que para lograr el éxito en nuestro negocio es fundamental hacer un Plan de Marketing del cual se desprendan las estrategias de promoción que te permitirán establecer, en primer lugar, cómo vas a posicionar tu producto o servicio; si de forma online (mediante el marketing digital con el uso del Internet) o de forma offline (mediante el marketing convencional con el uso de la prensa, radio, televisión o el cara a cara).
Otro aspecto importante dentro del Plan de Marketing es cómo conseguir que tu firma se gane la confianza y lealtad de los consumidores. Para lograr la fidelización del cliente se necesita de ingenio y de creatividad más que de recursos económicos. Si tu marca no ofrece algo innovador por ser nuevo en el mercado, recurre por crear estrategias de promoción que involucren las emociones, sentimientos y gustos de tu público con tu producto o servicio.
En dicho plan recuerda, en primera instancia, identificar tu target, luego analizar quiénes serán tus primeros clientes potenciales, para entonces saber cómo les venderás tu producto o servicio; bien sea por medio de una página web, de marketing de contenido en redes sociales, por publicidad digital o tradicional, vía telefónica o cara a cara.
Sin embargo, el desarrollar una red de contactos a través del Networking es una tendencia que está tomando auge. Es una filosofía de trabajo que consiste en hacer y mantener vínculos con los contactos que hemos conocido a lo largo de nuestra trayectoria profesional; como emprendedores podemos dar a conocer nuestra firma a través de dichos contactos, difundir las promociones de los productos y servicios y, ¿por qué no? hasta brindar oportunidades de empleos.
Es primordial que este Plan de Negocio lo realices con la mayor anticipación posible para que no se te escape ningún detalle de tu empresa y que tus inversores y clientes conozcan todo cuanto ofreces. Tu marca debe manejar un mensaje claro y conciso, debes ser coherente con lo que dices y haces pero a la par ser capaz de generar conexiones y empatía con el consumidor.
Sé un buen líder y olvídate de ser “el jefe”
Hay una gran diferencia entre ser un Jefe y un Líder. El líder desecha ese título de “intocable”, siempre busca la integración e interacción con su equipo de trabajo, se preocupa por escuchar y tomar en cuenta las opiniones y sugerencias de quienes colaboran con su proyecto en aras de proyectarse y posicionarse en el mercado como una firma de renombre. Un jefe solo se preocupa por engordar la cartera de clientes y sus ingresos sin importarle las condiciones y el ambiente laboral.
Tu desempeño como emprendedor determinará el fracaso o el éxito de tu empresa. Todo proyecto necesita de arduo trabajo, de coordinación y planificación, de estrategias y acciones puntuales para tener éxito, pero tratándose de un proyecto personal se necesita el doble de la carga. Persevera y no te estanques, a medida que vayas dedicándole tiempo al negocio verás excelentes resultados.
Edúcate, enfócate y acciona de la mejor manera posible para mantener a flote tu negocio. Si tu organización va por buen camino no está demás que consideres innovar e inclusive cambiar algunos procesos internos o externos cada cierto tiempo. ¡Anímate a lo nuevo! Refrescar la imagen corporativa y el diseño web, los contenidos en las redes sociales o la manera de promocionar tu producto o servicio te permitirá expandirte hacia nuevos mercados y audiencias. Opta también por establecer vínculos con personalidades y mentores que puedan potenciar y dar a conocer tu proyecto además de asesorarte en temas específicos.
No te limites solo a obtener ganancias, concentra tus energías en tener buenos resultados. Cuando recién iniciamos un negocio debemos aprender a vivir con incertidumbre, y por muy extraño que parezca suele ser normal, pues todo comienzo es duro y más si nos inquieta la idea saber si vamos a recuperar o no –a mediano o a largo plazo– nuestro dinero y tiempo invertido en el proyecto. Lo ideal es emprender organizada y coherentemente. Si observas que tus estrategias no están funcionando como lo esperabas intenta con otras pero nunca bajes la guardia, ¡no te rindas! Recuerda que la práctica y la constancia hacen al maestro.
Escucha, monitorea y responde a las inquietudes de tu audiencia, de allí partirá el buen posicionamiento y reconocimiento de tu empresa. Como líder y emprendedor debes estar atento a los comentarios que genere tu capital humano, sin embargo, es recomendable que te enfoques también en hacerle seguimiento a tu marca en los medios de comunicación tradicionales y digitales así como en las redes sociales, de esta manera conocerás las necesidades de tus consumidores. Plantéate varios escenarios de crisis y elabora un plan de respuesta para atender las críticas constructivas y negativas de los consumidores por los diferentes canales de comunicación.